La nutrición personalizada es una opción que ha acumulado muchos seguidores en los últimos años, atraídos por un deseo de consumir una dieta adaptada a sus necesidades individuales. Este segmento constituye un reto importante para la actual industria alimentaria, dado que requiere la adaptación y revisión completa de los modelos comerciales de la industria.
Este tipo de nutrición ha ganado terreno en áreas como la salud intestinal, donde la comprensión avanzada y detallada del microbioma ha fomentado la innovación en esta categoría. “Cada vez es más fácil para las personas comprender su propia salud intestinal y establecer un vínculo con sus necesidades nutricionales” afirmó Phil Mackie, gerente de Food Navigator. En este sentido, Mackie reconoció que el espacio para la nutrición personalizada es aún incipiente, sin embargo, el avance en la comprensión de la salud intestinal lo convierte en una categoría de lanza hacia esta línea y constituye un avance para que las personas puedan elegir sus productos basados en sus propios objetivos y estilos de vida. Sin embargo, todavía no se ha llegado al punto en el que la composición genética de las personas se pueda usar fácilmente como base para recomendaciones dietéticas.
Hasta la fecha, los esfuerzos en torno a la personalización a menudo se han centrado en la entrega y/o a las adaptaciones de formato, sin embargo, se requiere de más trabajo para pasar al siguiente nivel. El reto es que los sistemas alimentarios actuales se enfocan en ofrecer productos en masa a precios más baratos y seguros. “Claramente no es rentable fabricar formulaciones totalmente personalizadas, sin embargo, existe un punto medio en el que los fabricantes pueden ofrecer productos personalizados con mayor precisión, por ejemplo, mediante el ensamblaje de productos en una etapa tardía”, afirmó Mackie. En relación con este último se refiere a realizar el montaje en etapas tardías de kits de comida o productos recién hechos en el punto de compra, es decir el producto principal se realizaría a escala, y luego se adaptaría para satisfacer las necesidades nutricionales específicas.
Es probable que el desarrollo tecnológico también influya en la forma en que se desarrolla el sector. Por ejemplo, empresas como Nestlé opera el programa Nestlé Wellness Ambassador, en el cual los usuarios pueden cargar sus imágenes de sus alimentos en una aplicación y envían muestras de sangre y ADN para identificar su susceptibilidad al colesterol alto o la diabetes.
Fuente: Food Navigator Fecha: 24 de junio de 2020
Implicaciones para Costa Rica
La experiencia de compra constituye actualmente uno de los factores de mayor importancia para el consumidor, el cual es cada vez más exigente al momento de realizar sus compras. De esta forma, la búsqueda de la personalización y la incorporación de tecnología al momento de la compra permite una mayor diferenciación con respecto a los competidores y se alinea con la búsqueda de mayor salud y bienestar. Esta tendencia también evidencia la cada vez mayor convergencia entre el sector alimentario, el sector salud e inclusive el de TI. La sinergia que se genera del trabajo intersectorial podría favorecer el desarrollo de opciones altamente personalizadas y de alto valor agregado, mejorando así la propuesta de valor de la oferta e incentiva los procesos de innovación.
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