De acuerdo con el Consumer Insights de Kantar, en el segundo trimestre de 2020 se registró el consumo más fuerte de los últimos años en América Latina. Se presentó un incremento acelerado en las últimas semanas de mayo hasta junio, superando los niveles de consumo pre COVID-19, esto incentivado por los programas de transferencias de efectivo en países como Argentina, Brasil, Chile y Perú. Combinando todos los países de Latinoamérica, se calcula que 100 millones de personas recibieron algún tipo de apoyo del gobierno en el segundo trimestre de 2020. Hasta un 80% de estos recursos se utilizan para comprar productos básicos, por lo que el impacto en el mercado de bienes de consumo es enorme y alcanza principalmente los niveles socioeconómicos más bajos.
El principal impacto en el consumo viene de la presión económica y las restricciones de movilidad que se establecen, los cuales definen el ambiente de consumo en cada mercado. El tiempo extra en casa repercute en los hábitos de compra, es decir, cuanto más se está en el hogar, la frecuencia de compra disminuye, por lo que hay menos exposición, y por consecuencia se hacen compras más grandes por ocasión. Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú se enfrentaron a “elecciones más difíciles”, ya que, con sus ingresos habituales reducidos, y sin mucho dinero extra del gobierno, la permanencia en el hogar generó necesidades claras, por lo que se vieron forzados a elegir lo esencial. Al contrario, de Brasil y México, con menos restricciones tanto en ingresos como en movilidad, pudieron mantener un comportamiento más normal y hasta gastar más en lo no esencial e indulgencia.
En este contexto, los latinos han utilizado mayormente los pagos con tarjeta, ya que el efectivo se ha considerado como una fuente de potencial contagio, por lo que el gasto con este método de pago se incrementó tres veces más en comparación con el efectivo y ha permitido dinamizar las compras por el canal de comercio electrónico que en la pandemia ha podido alcanzar a alrededor de 10 millones de latinos y ha ganado mayor penetración en segmentos como el de mayores de 65 años el cual previo a la pandemia tenía barreras para usar este canal.
Fuente: Kantar World Panel Fecha: 15-setiembre-2020
Implicaciones para Costa Rica
Las presiones económicas y el confinamiento han cambiado los hábitos de consumo de las personas alrededor del mundo, incluyendo Latinoamérica, lo cual ha hecho que las compras se realicen fundamentalmente para artículos de necesidad básica (como alimentos e higiene), apoyado en ocasiones por las transferencias gubernamentales a sectores de la población con ingresos medio-bajo, y otros dependiendo del nivel de afectación, ha habido mayor compra de productos de indulgencia. Esta dinámica de consumo en naciones similares a Costa Rica debe ser tomada en cuenta por los exportadores nacionales para dirigir sus productos a países de la región, tomando en cuenta, además, el incremento del dinamismo de las compras mediante comercio electrónico y tarjeta de crédito.
Las exportaciones costarricenses a América Latina y Caribe alcanzaron 1 886 millones de USD acumulado a julio 2020, lo cual es una reducción de 6%, respecto al mismo período del año anterior. Los principales países importadores para 2020 fueron centroamericanos en los que destacan: Guatemala (19%), Nicaragua (15%) y Panamá (15%).
Basándose en esta Alertas Comerciales, ¿en que nivel recomendaría este servicio a otros exportadores
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