El Salvador duplica sus importaciones de cerveza en una década

El Salvador duplicó en 2016 sus importaciones de cerveza respecto a 2006, según informó recientemente el medio local Diario de Hoy a partir de los datos del Banco Central de Reserva. Las compras en el exterior de dicha bebida por parte de este mercado centroamericano alcanzaron en el período anterior los $10,6 millones, frente a los $5,2 millones registrados diez años antes.

Dicho país adquiere en la actualidad cervezas procedentes de 40 países. Su principal proveedor en 2016 fue México, con unas ventas de $4,1 millones. A continuación, se situaron Guatemala, Costa Rica, Estados Unidos y Colombia.

Junto a la cerveza, también destacó el repunte de las importaciones de ron, que sumaron un valor de $6,2 millones en 2016 y prácticamente se duplicaron desde 2006. El curso pasado los cinco principales países de origen en el caso de esta bebida fueron Guatemala, Nicaragua, México, Panamá y el Reino Unido.

Por otro lado, las compras al exterior de vino, a pesar de haber crecido en los últimos años, se mantienen en niveles bajos. De esta forma, en 2016 las entradas de este producto apenas superaron los $460.000. En total, las importaciones de bebidas alcohólicas por parte de este mercado centroamericano alcanzaron el año pasado a los $22,3 millones.

Implicaciones para Costa Rica

Costa Rica exportó en 2016 un total de $5,5 millones en cerveza a países como Estados Unidos, El Salvador, Guatemala, Nicaragua, Panamá.

Las exportaciones costarricenses de cerveza a El Salvador han tenido un crecimiento de un 0,24% en 2017 correspondiente al año anterior. Asimismo, el crecimiento interanual de 2015 a 2016 fue de un 0,22%. Este crecimiento se ve reflejado en un aumento de la demanda del país centroamericano.

No obstante, las importaciones salvadoreñas no necesariamente se suplen de nuestras exportaciones, por tanto, es importante que el empresario costarricense aproveche esta coyuntura para ofrecer sus productos.

Las ventajas del comercio centroamericano, como la homologación de registros, facilidades en logística y preferencias arancelarias puede ser una ventaja que el exportador puede mencionar a la hora de negociar con este país.