Según una investigación realizada por la Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA por sus siglas en inglés), la complejidad de las etiquetas, el tamaño de la letra y algunas otras cuestiones, provocan que no sean consultadas por los consumidores.
La FSA encargó a la TNS BMRB, una empresa especializada en la investigación y análisis de mercado, datos estadísticos, etc., un estudio sobre la comprensión que tienen los consumidores de Irlanda del Norte de la información que aparece en las etiquetas alimentarias y cómo influye en su comportamiento de compra, prioridades y preocupaciones. Según los datos obtenidos, en muchas ocasiones la información del etiquetado es ignorada, los consumidores realizan sus compras de forma rutinaria y repetitiva, utilizando las etiquetas únicamente para identificar ingredientes concretos, sea por una dieta, cuestiones de salud como la alergia, o de vez en cuando para examinar un nuevo producto adquirido.
A partir de los resultados obtenidos se considera que las etiquetas alimentarias deben ser más visuales, tener más imágenes y menos números, es decir, una mayor visualización para que los consumidores puedan tomar decisiones de compra más informadas e inteligentes. Los expertos consideran que es importante que la letra de las etiquetas sea mucho más grande, ya que muchos consumidores tienen problemas para leer la información y por ello abandonan su interés de conocer más acerca del producto que adquieren. Una información más visual requiere un esfuerzo cognitivo mínimo, letras grandes e imágenes ayudan a obtener rápidamente la información sin confusión.
A pesar de los inconvenientes, los consumidores quieren acceder a la información de un modo más comprensible, especialmente la que alude al tamaño de la porción y a su contenido nutricional, algo debido, probablemente, a la tendencia de querer disfrutar de una alimentación más saludable. Por otro lado, quienes realizan las compras en línea priorizan la comodidad y la rapidez, son menos propensos a considerar la información del etiquetado de los productos.
Fuente: ÉnfasisPackaging Fecha: 29-agosto-2016
Implicaciones para Costa Rica
Las exportaciones de la industria alimentaria costarricense en los primeros siete meses de 2016, ascendieron a $918 millones, los principales destinos a los que se dirigieron los envíos fueron EE.UU, Guatemala y Nicaragua. Entre los principales productos exportados se encontraron jugos y concentrados de frutas, jarabes para la preparación de bebidas gaseadas, aceite de palma, salsas y preparaciones y productos de panadería fina.
La presentación de un producto, así como la información que se le brinda al consumidor en el empaque tiene un alto impacto en la decisión de compra de este, por lo que encontrar las mejores formas de hacerlo podría dinamizar su nivel de ventas, así como lo señala el estudio el comprador actual busca mayor información sobre los productos que compra, sin embargo, el tiempo disponible para hacerlo en el punto de venta es cada vez menor por lo que darle al comprador la información que busca de la forma más atractiva es lo que diferenciará a los productos ante los ojos del consumidor.
Esta información no solo se limita al detalle nutricional o ingredientes del producto, sino a las principales características con las cuales el productor espera brindarle un mayor valor al consumidor por su compra, debido a esto el exportador nacional debe buscar innovar constantemente en la presentación de sus productos y alinearse con las nuevas tendencias y necesidades que motivan al comprador final para lograr una mayor aceptación.
Basándose en esta Noticia, ¿en que nivel recomendaría este servicio a otros exportadores
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