Controles sanitarios incrementan el retiro de alimentos en la UE

La seguridad de los consumidores es de vital importancia, a nivel global se presentan enfermedades transmitidas por los alimentos, productos contaminados y etiquetas incorrectas o engañosas. En 1979 se creó el Sistema de Alerta Rápida para los Productos Alimenticios y los Alimentos para Animales (RASFF), la Unión Europea tiene uno de los estándares de seguridad alimentaria más altos del mundo, dicho sistema comparte información con sus miembros para ofrecer un servicio ininterrumpido en seguridad alimentaria. Entre estas iniciativas, se incluye el asegurar el envío de notificaciones urgentes sobre la retirada de productos, así como responder de forma colectiva y eficaz para proteger a los consumidores de cualquier riesgo de seguridad alimentaria. Los informes anuales del RASFF entre 2017 y 2019 ofrecen información reveladora sobre la magnitud y naturaleza de la contaminación en los productos alimentarios en toda Europa. Además, muestran que la cifra de notificaciones originales sobre riesgos detectados en alimentos aumentó 7% desde 2017.  Los productos sobre los que más se ha notificado en 2019 son: alimentos dietéticos, suplementos, frutas, verduras y carne.

Para los fabricantes de alimentos, la retirada de productos es un asunto de suma importancia. Cada año se retiran productos debido a la contaminación física por vidrio, piedras, metal, huesos, plástico o efectos personales, entre otros. Los errores de etiquetado se pueden reducir mediante la implementación de tecnologías de inspección por visión que rechazarán todas las etiquetas no conformes según la fase de envasado principal. Para reducir la probabilidad de retirada de productos, los fabricantes de alimentos pueden seguir estas recomendaciones:

• Identificar en su línea de producción dónde se puede producir la contaminación física, por ejemplo en materias primas, piezas rotas, defectos de envasado.
• Determinar los puntos de control críticos en la línea de producción.
• Instalar tecnología adecuada para mejorar la inspección de productos.
• Se recomienda tener en cuenta las tendencias actuales y futuras en la industria alimentaria y realizar inversiones acorde a estas.

Fuente:  Énfasis Alimentación      Fecha: 18-Ene-2021

Implicaciones para Costa Rica

Las exportaciones costarricenses de alimentos superaron los $1.627 millones de USD en el 2020, de estos aproximadamente $202 millones (12%) se dirigieron a la Unión Europea, los principales productos enviados a esta región fueron: jugos y concentrados de frutas, frutas tropicales conservadas, aceite de palma, azúcar, palmito y purés y pastas de frutas.

Es importante que los exportadores nacionales estén al tanto de los futuros cambios que se pueden dar en las regulaciones para la comercialización de productos de la industria alimentaria en la Unión Europea, con especial atención en la normativa de acceso y comercialización, principalmente para aquellos empresarios que colocan sus productos como bien final, pues el no acatar de manera oportuna dichas modificaciones podría llegar a restringir el acceso de los productos a este mercado.