Las compras en línea prevalecerán en el post-pandemia

Según un análisis de Oracle Grocery Retail, las compras en línea seguirán siendo importantes para los compradores incluso después de superada la pandemia. El 53% de los consumidores compraron comestibles en línea durante la pandemia y el 93% planea seguirlo haciendo aún después de la crisis.

“Los pedidos de comestibles en línea no son nuevos, pero la pandemia fue el punto de inflexión para generalizarlos. Los minoristas se vieron obligados a lidiar tanto con problemas de la cadena de suministro como con el comportamiento del consumidor que no era normal, lo que provocó caos y escasez”, comentó Mike Webster, vicepresidente de la firma. “Si bien las tiendas navegaron con relativa rapidez, los datos muestran que los consumidores no tienen planes de volver a sus viejos hábitos. Los comercios deben examinar lo que eso significa para sus operaciones, la distribución de las tiendas y todo lo demás implicado”.

El 72% de los compradores de comestibles en línea eligieron la entrega a domicilio para recibir sus pedidos, el 28% optó por los servicios de compra y recogida (click & collect), el 15% utilizó la recolección en la acera y el 13% hizo sus compras normales en la tienda.

Los minoristas han hecho un buen trabajo al utilizar las tiendas físicas como almacenes improvisados ​​para cumplir con los pedidos y entregarlos rápidamente a los clientes. Sin embargo, deben equilibrar cuidadosamente la interrupción de los servicios de entrega.

Fuente: Specialty Food Association  Fecha: 24-Noviembre-2020

Implicaciones para Costa Rica

El contexto de mercado generado por la pandemia ha acelerado el posicionamiento y uso maximizado de la tecnología en las compras tradicionales retail. Se estima que en 2020 hubo un incremento del 160% tan solo en las compras por ecommerce entre usuarios nuevos o de baja frecuencia.

Si bien el impacto mayor está centrado en los distribuidores y minoristas, debido a las nuevas necesidades de logística ampliada, trazabilidad e inocuidad que implica el modelo e-commerce, para la industria alimentaria costarricense resulta de especial importancia comprender los cambios generalizados en las dinámicas de compra y canales de distribución, de manera que puedan prever ajustes en sus interacciones tanto con distribuidores como con consumidores finales.

Al mismo tiempo, este contexto representa un espacio para el replanteamiento de presentaciones, empaques, surtidos y materiales de cara a las necesidades y gustos de un consumidor ahora digital, vinculado a una distribución más expedita, de menor escala y en canastas de compra más pequeñas, pero más frecuentes. En el mediano y largo plazo, posterior a la crisis, se estima que cerca del 30% de los consumidores disminuyan sus compras en puntos de venta físicos, al tiempo que reorientan un mayor gasto hacia productos alimentarios centrados en salud, bienestar y artículos para mejorar en general la vida del hogar, al pasar ahora más tiempo trabajando, estudiando o entreteniéndose desde casa.