La crisis y la revolución tecnológica han modificado la forma de comprar del 75% de los españoles, así lo indica la encuesta de hábitos de consumo realizada por la Mesa de Participación Asociaciones de Consumidores (MPAC) de España.
Existe un nuevo tipo de consumidor que se conoce como prosumer, hiperconectado e hiperinformado el cual desea disponer de información en todo momento, tener un servicio y entrega rápidos y vivir una experiencia de compra personalizada. El consumidor se ha acostumbrado a seguir las ofertas y a comparar mucho entre marcas para ver cuál es la mejor relación calidad-precio, por su parte las redes sociales y los blogs permiten a los usuarios realizar una búsqueda muy exhaustiva, crear grupos de discusión y lanzar recomendaciones.
Al cambio digital se une el demográfico. Cada vez más españoles viven solos, la población envejece, aumentan las familias monoparentales y pequeñas y el rol de ama de casa se desvanece. El estrés, un estado muy común en las sociedades actuales, también influye en la forma que se compra comida, por ejemplo, según un estudio de Kantar World Panel, el 43% de los españoles siente que no le queda tiempo libre, por lo que, el cliente quiere una compra rápida y cómoda y se inclina por el consumo de productos preparados como sopas y ensaladas.
Otra de las últimas tendencias es la comida saludable, bio o “libres de” (gluten, azúcar, conservantes). La preocupación por la salud o el medio ambiente ha impulsado enormemente la incorporación de nuevos productos saludables, funcionales y sostenibles. Según el informe de MPAC, el 20% de los ciudadanos opta por productos libres de alérgenos, además esta tendencia por lo saludable y natural influye en la preferencia a los productos frescos, por ejemplo, el 93% de los españoles opta por la carne fresca frente a un 5% que la compra en formato congelado; en el caso del pescado, el fresco es la opción para el 71% y el congelado para el 27%.
Los supermercados, hipermercados y las tiendas de alimentación (pulperías) se renuevan constantemente para adaptarse a las nuevas necesidades del consumidor.
Fuente: América Retail Fecha: 29 de junio de 2017
Implicaciones para Costa Rica
En 2016 Costa Rica exportó un total de $151,9 millones a España, donde los sectores más dinámicos fueron el agrícola (71%) y el alimentario (26%), este último ha ganado terreno recientemente, sin embargo, es indispensable que el exportador costarricense conozca el perfil del cliente final de sus productos. Lo cual le permitirá ajustarse a las nuevas necesidades y formas de consumo.
Un consumidor español cada vez más diverso, supone a su vez, una oportunidad para el crecimiento de los negocios con este país, ya que, el exportador costarricense puede innovar en productos con mayor valor agregado, sin embargo, el mantenerse constantemente informado de las últimas tendencias de consumo o de nuevos productos es requisito para que el sector exportador tenga un mejor desempeño.
Se recuerda a los actuales y potenciales exportadores interesados en el mercado español que PROCOMER cuenta con una Oficina de Promoción Comercial en España en la que se pueden apoyar para cualquier consulta o información que requieran, para detalles pueden comunicarse por medio de los datos de contacto en el siguiente enlace.
Además, la Dirección de Inteligencia Comercial de PROCOMER elaboró el estudio: “España: mercado potencial para alimentos saludables”, el cual describe detalladamente la forma de comercializar productos alimenticios frescos, alimentos relacionados con la salud y el bienestar y étnicos procedentes de Costa Rica.
Basándose en esta Noticia, ¿en que nivel recomendaría este servicio a otros exportadores
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