Dentro de esta industria, los ingredientes
más utilizados son la manteca de cacao, licor o pasta de cacao y cacao en
polvo. Este tipo de productos se comercializan principalmente en supermercados,
hipermercados y mayoristas y grandes almacenes.
Por otra parte, la industria de cosmética y
cuidado personal es la segunda con más uso del cacao como insumo. En el mismo
periodo, 8.513 productos de la industria ingresaron al mercado, fabricados
principalmente por Estados Unidos y el Reino Unido. De todos estos productos,
al menos la mitad son “ético-ecológicos” y están elaborados utilizando
principalmente manteca de cacao.
Los principales mercados importadores son
Europa, EEUU y Canadá, los cuales ven dinamizada su demanda por la búsqueda de
cacao de alta calidad y único origen.
Cacao costarricense
El cacao costarricense es del tipo “fino y de
aroma” y se diferencia del cacao comercial por varios factores. El principal de
ellos es el sabor, el cual puede tener toques frutales, florales, herbáceos, de
madera, de nueces o con caramelo. Además, este tipo de cacao se asocia con una
influencia positiva en los ámbitos social y ambiental de las comunidades donde
se cultiva, así como un mejor precio en comparación con el comercial.
Durante el 2018, Costa Rica fue el exportador
de ingredientes de cacao número 71 en el mundo. En total, el país exportó $1,2
millones, de los cuales el 68% tuvo como destino los Países Bajos y el 22% se
exportó a Panamá.
Marta Esquivel, Directora de Inteligencia
Comercial de PROCOMER, afirmó que el sector cacaotero del país debe tomar
varias consideraciones para aprovechar las oportunidades que existen en los
mercados internacionales. “La designación de Costa Rica como productor de cacao
100% fino y de aroma es una ventaja competitiva de posicionamiento país. Por lo
que recomendamos al sector dirigirse a la industria alimentaria en mercados
maduros como el europeo, donde la apreciación de materia prima para elaboración
de chocolate gourmet y la tendencia bean
to bar está presente”.
Esquivel agregó que la materia prima con
cacao debe tener excelentes características organolépticas, comprobables
mediante perfil organoléptico y catación. Además, el sector debe estandarizar
procesos de producción, conocer de la trazabilidad, garantizar la separación de
variedades y la calidad final del producto.