El comportamiento de los consumidores ha ido evolucionando durante el periodo de confinamiento desde que España entró en el periodo de alarma y, como ha corroborado la consultora Nielsen ha surgido un nuevo perfil de comprador. Según la consultora, los compradores del postconfinamiento intensificarán su preocupación por el control del gasto, además de aumentar su mayor preocupación por la seguridad y trazabilidad de los productos. De hecho, María Ángeles Zabaleta, Client Development Director en Nielsen, ha destacado que “el consumidor de este 2020 no será el mismo de 2008, sino una mezcla de lo que aprendió en aquella crisis y los comportamientos que ha adquirido durante el confinamiento”.

Una de las tendencias que se acentuarán tras la desescalada será la tecnología y la omnicanalidad. Con la crisis del COVID-19 se han multiplicado los hogares que hacen en algún momento la compra online, pasando de 450.000 a cerca de 1,1 millón de hogares. “En ningún caso se vislumbra la posibilidad de que ceda la compra física, sino que los consumidores adoptarán ambos canales en función de la misión de compra”, señala Nielsen. Precisamente, el canal online ya acumula desde el inicio de la crisis sanitaria un crecimiento del 86,6%. En la última semana analizada, entre el 20 y el 26 de abril, el incremento versus la misma semana del año anterior fue del 149%, siguiendo la estela a triple dígito de siete días atrás. El mercado, por tanto, mantiene su nivel de crecimiento que, en el caso de la semana del 20 al 26 de abril, aumentó un 17% sus ventas; en las nueve semanas ya analizadas ha crecido un 21,4% en total. Estos incrementos se seguirán produciendo, ha explicado la directora general de Nielsen Iberia, Patricia Daimiel, ya que la evolución del mercado del gran consumo irá “muy de la mano” del proceso de desescalada.