De acuerdo con Nielsen, el consumo de productos premium experimenta un fuerte crecimiento en América Latina y sigue teniendo un potencial importante, motivado por factores como la percepción de una mejora financiera de los consumidores.

El estudio señala que los consumidores compran estos productos, tanto por razones emocionales como racionales, pero las emocionales resuenan más en mercados emergentes donde las aspiraciones de estatus y logros son mayores. “Más allá de los beneficios funcionales, los consumidores acceden a productos premium también porque les hace sentir bien y con mejor imagen de sí mismos”, afirma Carlos Altieri de Nielsen.