A partir de la aplicación de una técnica especial, investigadores de la Facultad de Ciencias Químicas y del Centro de Química Aplicada (Cequimap) de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), lograron inmovilizar un agente antimicrobiano en la superficie de una lámina de polipropileno, material utilizado para recubrir alimentos. Así, se inhibió la acción de las bacterias Escherichia coli y Staphylococcus aureus en ensayos de laboratorio. La innovación permitiría extender entre tres y cuatro veces el tiempo actual de conservación.

Los llamados “envases activos” aportan funciones específicas que se suman a las ya clásicas de los envases tradicionales. Son objeto de amplio desarrollo y estudio en diversas partes del mundo. Se caracterizan por sus aplicaciones científicas ya que alargan la conservación y seguridad de los alimentos que contienen y protegen de esa manera, a los consumidores. En este caso la principal función, es la de prolongar los tiempos de conservación de alimentos como carnes rojas, pescado y otros que contengan glucosa.