
Un análisis realizado por la productora española de contenidos interactivos 2cilindros revela que 9 de cada 10 estudiantes prefieren la formación interactiva, es decir, vídeos y contenidos con los que pueden relacionarse y que les brindan distintas opciones. Y si el aprendizaje resulta divertido, mejor. Precisamente la clave radica en esta percepción de juego. Tal es así, que los vídeos interactivos mejoran la tasa de recuerdo en hasta un 90% (frente a una lección verbal tradicional) e incluso agilizan el aprendizaje (se aprende un 70% más rápido).
Además, favorecen la atención, la cual en promedio se pierde a los 8 segundos, y obligan a tener una actitud proactiva. Se trata de un mensaje multisensorial en el que se presentan estímulos auditivos y visuales, y se prima el autocontrol y autogestión. Asimismo, permite que el visionado se detenga en imágenes simples, infografías, otros vídeos complementarios, etcétera.