
La consultora Kantar realizó un análisis comparativo del comportamiento del consumidor mexicano en tiempos de pandemias como H1N1, SARS y ahora el COVID-19. Es probable que se repliquen algunos comportamientos de compra en el panorama actual del coronavirus. Por ejemplo, en esa época crecieron canastos de alimentos, cobrando relevancia en canales de cercanía como la tienda de la esquina o de conveniencia. Todos los canales perdieron penetración y frecuencia, ya que las familias salían menos para evitar el contagio. Los especialistas esperan que, para esta primera etapa, en la que se están realizando compras de pánico, que los establecimientos como autoservicios deberían estar bien surtidos, aunque sí habrá una baja en las visitas, ya que la gente no está dispuesta a salir, por lo que en este periodo el comercio electrónico tomará relevancia como sucedió en China, donde el efecto del coronavirus impulsó al e-commerce.
El comportamiento del consumidor después de la pandemia ya no será el mismo, tampoco lo serán las marcas. La lealtad será más difícil de defender, no obstante, estamos seguros que el enfoque seguirá estando en generar experiencias altamente distintivas en acciones y contenido, porque la experiencia aumenta significativamente el valor de una marca. Las marcas que usan la tecnología como un canal o vehículo para impulsar la conectividad con el consumidor se volverán cada vez más cruciales. Hoy permea la necesidad de monitorear el comportamiento del consumidor para poder anticiparse a sus preocupaciones y necesidades. Asimismo, las marcas deberán mantener una comunicación asertiva, acompañada de acciones y mensajes de esperanza y optimismo, y por supuesto, acelerar la transformación digital. De esto depende su generación de valor y crecimiento.