Las empresas estadunidenses planean continuar desplazando las cadenas de suministro fuera de China, independientemente de quién gane las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, según Tim Ryan, presidente de la firma de consultoría PwC U.S., esto como respuesta a la guerra comercial con China, y que ganó impulso debido a la pandemia de coronavirus, que evidenció la gran concentración de las cadenas de suministro en un solo mercado.

La producción de equipos médicos y suministros farmacéuticos fuera de EE. UU., en particular, ha sido objeto de un nuevo escrutinio durante la pandemia, ya que las fábricas en todo el mundo cerraron y surgió la escasez de suministro. La combinación de la guerra comercial y la pandemia también mostró que los minoristas habían confiado «demasiado» en la producción en China, dijo exdirector ejecutivo de Macy’s, Terry Lundgren.