La sostenibilidad sigue ganando terreno en la mente del consumidor a la hora de elegir dónde y qué comprar. Así lo demuestra un estudio elaborado por GlobalData en Reino Unido, que señala que el 71% de los compradores tiene en cuenta el impacto ambiental durante su elección de establecimiento y producto de alimentación. Este dato cae hasta el 64% cuando se trata de compras de ropa y calzado.

Varias cadenas de distribución británicas han anunciado planes de reducción de plástico en un intento de mostrar a los consumidores su compromiso con el ambiente. Así, Morrisons introducirá bolsas de papel para frutas y verduras a granel, mientras que Lidl dejará de usar envases de plástico no reciclable.