Los Millennials y la Generación Z, están impulsando el crecimiento en el consumo de vegetales frescos y congelados en Estados Unidos, según el NPD Group, empresa global de información. Los consumidores menores de 40 años aumentaron sus comidas anuales per cápita de verduras frescas en un 52% y congeladas en un 59% durante la última década. Los consumidores de 60 años o más disminuyeron su consumo de verduras frescas y congeladas durante el mismo período en un 30% y un 4%, respectivamente.

Aunque el pronóstico de crecimiento de la categoría no es tan fuerte como las verduras frescas, que se espera aumente en un 10%, se prevé que el consumo de hortalizas congeladas aumentará en un 3% hasta 2024.