También, la empresa
MeliBio, a través de un proceso de biología sintética, elimina a las abejas de
la ecuación al hacer miel. La compañía creó un producto idéntico al replicar el
proceso de múltiples pasos que usan las abejas melíferas para convertir el
néctar en alimento, mediante el uso de tecnología patentada que incluye
biología sintética, fermentación microbiana y ciencia vegetal. El proceso
utiliza compuestos que solo se encuentran en la miel convencional, incluidas
variaciones basadas en las flores con las que las abejas suelen entrar en
contacto.
Otro caso es Remilk, que al
copiar el gen responsable de la producción de proteína de leche en las vacas y
mezclarlo con levadura que luego se fermenta, las proteínas Remilk junto con
vitaminas, minerales y grasa y azúcar no animales se convierten en leche sin
colesterol ni lactosa. El proceso emite hasta 97% menos gases de efecto
invernadero y usa solo el 1% de la tierra, el 4% de la materia prima y 10% del
agua en comparación con la producción láctea tradicional.
Finalmente, Zero Acre
Culture, elabora a través de la fermentación, un aceite que convierte los
azúcares naturales de las plantas en grasas saludables, que tiene un 90% menos
de huella ambiental que el aceite vegetal convencional y, al mismo tiempo,
tiene el mismo aspecto y tacto. Requiere 300 veces menos agua que el aceite de
oliva y 17 veces menos tierra.
Fuente: Specialty Food
Fecha: 01-Noviembre-2022
Implicaciones
para Costa Rica
La industria
alimentaria es uno de los segmentos de mayor diversificación y generación de
nuevas propuestas diferenciadas, donde la búsqueda de nuevas tecnologías,
procesos e ingredientes resulta normalmente una de las prioridades del sector.
En este caso, las técnicas de fermentación de precisión destacan como una
alternativa atractiva, tanto para fabricantes como consumidores, al permitir
ofertar nuevos alimentos que se alinean a ejes de sostenibilidad y salud, pero
sobre todo ofrecerle al consumidor la posibilidad de probar nuevas experiencias
diferenciadas.