
Con una presión cada vez mayor sobre los líderes de la cadena de suministro (CS) para implementar respuestas tecnológicas a las interrupciones, la escasez de insumos y los incidentes de seguridad, Gartner identificó las principales aplicaciones tecnológicas de la cadena de abastecimiento, dado su potencial para ofrecer automatización, inteligencia y resiliencia. A continuación, se señalan algunas:
- Hiperautomatización 2.0: identifica, examina y automatiza rápidamente tantos procesos comerciales y de TI como sea posible mediante el uso de inteligencia artificial (IA) y machine learning. Durante los próximos cinco años, se integrarán más tecnologías para soluciones como redes inteligentes de cumplimiento remoto en gestión de almacenes o patios.
- Robots de próxima generación: se visualizan aplicaciones como flotas heterogéneas de robots donde deberán interactuar entre ellos y comunicarse con otros tipos de equipos automatizados, como ascensores y puertas.
- Cosas autónomas: vehículos o drones que mejoren las tareas físicas con mayor eficiencia, y seguridad. Trabajando de forma independiente o en redes, también mejoran una nueva generación de trabajo inmersivo y experiencias del cliente mediante una mayor eficiencia y transparencia del servicio.
- Gemelo de la cadena de suministro digital: representación digital de la cadena de suministro física, sirve en la toma de decisiones locales y de extremo a extremo (E2E), que garantiza que las decisiones estén alineadas horizontal y verticalmente.
- Colaboración del ecosistema: tecnologías y servicios digitales que permiten conectividad con las partes interesadas clave, como redes de suministro de múltiples niveles o redes de empaque, lo cual tiene ramificaciones en la toma de decisiones. Respaldan el avance hacia conexiones digitales en tiempo real entre personas, datos, máquinas, sistemas y cosas.
- Herramientas de sostenibilidad: empresas que no inviertan en herramientas digitales que respalden sus objetivos y métricas de sostenibilidad corren el riesgo de tener un impacto negativo en la marca. Facilitan la toma de decisiones en riesgos como activos varados, vulnerabilidad al impuesto al carbono, falta de preparación para las interrupciones de la cadena de suministro relacionadas con el clima, entre otras.
Fuente: Gartner Fecha: 8 de junio de 2022