Un estudio realizado por el Cedars-Sinai (en el que participaron 100 pacientes hospitalizados) descubrió que aquellos que vieron videos tranquilizantes en un dispositivo de realidad virtual registraron una disminución de 24% en los niveles de dolor, por su parte, los pacientes que vieron un video de naturaleza en 2D con escenas relajantes en una pantalla cercana, experimentaron sólo una reducción del dolor de 13,2%.

Según Sam Rodríguez, anestesiólogo pediátrico del hospital Lucile Packard Children’s de Stanford, muchos juegos comerciales no funcionan en un entorno hospitalario porque son demasiado violentos o terminan cuando un personaje muere. Es por eso que CHARIOT (Childhood Anxiety Reduction through Innovation and Technology), el programa que co-fundó, trabaja con desarrolladores que crean contenido de realidad virtual diseñado específicamente para pacientes que experimentan experiencias dolorosas. Los investigadores también están explorando el potencial de la realidad virtual para reducir el dolor crónico.

Según Brennan Spiegel, directora de Investigación de Servicios de Salud en Cedars-Sinai en Los Ángeles, es un reto descubrir cómo incorporar la realidad virtual en el proceso de atención para que un médico pueda, por ejemplo, “prescribir” la realidad virtual a un paciente a través del registro electrónico de salud. Podrían seleccionar visualizaciones basadas en la condición de un paciente y decidir cuándo se debe usar la realidad virtual, como una opción antes de emplear analgésicos.

Implicaciones para Costa Rica

En Costa Rica la realidad virtual sigue siendo una tecnología incipiente, la captación de talento es una de las principales dificultades que deberá afrontar el sector servicios en la nueva producción de contenidos audiovisuales. Guionistas, cámaras, actores, iluminación, grabadores de sonido, diseñadores y programadores para transformar sus habituales formas de trabajar para generar experiencias en 360 grados.

Sin embargo, el sector servicios en Costa Rica debe interesarse por las oportunidades de negocio que ofrece esta tecnología:

• En medicina: desarrollo de herramientas de apoyo al diagnóstico y tratamiento de algunas enfermedades: trastornos de ansiedad, estrés postraumático, adicciones, fobias o rehabilitación física y cognitiva como lo indica la nota.
• Turismo: utilizar la realidad virtual en las agencias de viaje, sustituye al tradicional folleto de papel y permite a los viajeros entrar en las habitaciones de los hoteles, recorrer las playas o visitar las ciudades mediante vídeos panorámicos 360 grados, antes de elegir un destino.
• Arquitectura: reproducciones de arquitecturas existentes que pueden visitarse sin desplazamientos, y la creación de espacios virtuales de posibles edificaciones.
• En materia educativa: en niveles superiores de formación donde su tecnología resulte más útil conforme a la metodología learning by doing, donde los alumnos pueden manipular maquinaria especializada sin necesidad de desplazarse a las instalaciones ni correr riesgos de accidente laboral u ocasionar daños en maquinarías de costo elevado.

En general, el uso de esta tecnología supone potenciales oportunidades para el sector servicios en diferentes campos.